Montevideo, 29 oct (EFE).- La banda de rock uruguaya "No Te Va Gustar" deleitó esta noche a miles de trabajadores del parque empresarial de Montevideo con un exclusivo concierto en el que repasó lo mejor de su trayectoria.
Durante dos horas de vibrante directo, los nueve integrantes de esta formación, una de las más consolidadas del panorama uruguayo, demostraron que la música amansa a las fieras y es el mejor remedio para desconectarse de una larga jornada de trabajo.
Empleados de todos los rubros y especialidades disfrutaron de este particular show, exclusivo para trabajadores de Zonamérica, el parque empresarial y de negocios ubicado en la zona franca de Montevideo y sede de muchas de las multinacionales afincadas en el país.
Con Emiliano Brancciari a la cabeza, los integrantes de "No Te Va Gustar" (o NTVG, como ellos mismos se presentan) recorrieron algunos de los temas clave de su ya larga trayectoria, fuertemente influenciada por el rock argentino, el reggae y la música tradicional uruguaya.
"El camino", single de su último disco, "El camino más largo", fue la carta de presentación de la banda ante un auditorio que rondaba las 5.000 personas, algunas de ellas ataviadas con el traje de chaqueta propio de una jornada laboral.
Sin embargo, ni el ambiente de distensión ni el lugar, un amplio predio de césped en las inmediaciones de la zona franca, hacían pensar que se trataba de un concierto, casi literalmente, a las puertas de la oficina.
"Mañana va a ser un gran día, te lo digo yo / nos vamos a mirar las caras entre todos", cantaba Emiliano, y parecía resumir la filosofía de este evento, concebido para crear un espacio de encuentro entre los empleados de Zonamérica y fomentar sus lazos.
La música puso todo de su parte con temas como "Cielo de un solo color", "Clara" o "Verte reír", uno de los más elogiados de su disco "Aunque cueste ver el sol", de 2004.En los bises hubo lugar para recordar a uno de los grandes nombres de las letras uruguayas, el poeta Mario Benedetti, quien colaboró con la banda en el disco "Todo es tan inflamable" (2006) y cuya voz fue hoy reproducida en el tema "De nada sirve", que clausura con sus versos.
Los momentos de máxima intensidad llegaron con "Revolución" y "Fuera de control", cuando Emiliano, voz y guitarra, se acercó al auditorio para entregarse a su abrazo colectivo.
Tras una década sobre los escenarios y con seis discos a sus espaldas, NTVG volvió a demostrar que se encuentra en plena forma y que su música, a medio camino entre lo autóctono y lo global, es un viaje para los sentidos.
Fuente: http://www.google.com/hostednews/epa/article/ALeqM5jGtqQQlIDQmcX54lYXQltz3fBKcQ
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